Impresoras 3D

 

La impresión 3D se abre camino velozmente, lo hemos podido comprobar con la reconstrucción de cara que le hicieron al británico Stephan Power de 29 años, siendo el primero en todo el mundo aunque esta técnica se ha usado para obtener e implantar vejiga, hígado y corazón entre otros.

 

Su cara quedo bastante desfigurada a causa de un accidente de moto en el cual, a pesar de llevar el casco puesto se rompió la mandíbula superior, la nariz, los pómulos y se fracturó el cráneo.

 

Para poder operarlo, primero los cirujanos hicieron un modelo tridimensional del cráneo de Stephan antes de que tuviera el accidente para que pudieran seleccionar las partes del hueso afectadas que debían sustituir. La operación, que duró sobre unas 8 horas, consistía en una reconstrucción facial usando partes hechas con una impresora 3D que generaron piezas de titanio hechas a la medida del paciente. La intervención quirúrgica tuvo lugar en el hospital Morriston de Swansea (Gales).

 

El cirujano maxilofacial Adrian Sugar, explicó que los resultados de este procedimiento quirúrgico no eran comparables a nada de lo que se había logrado antes con las técnicas plásticas tradicionales. Sthephan tiene algunas heridas de la cara "bastante bien arregladas" a excepción de su mejilla izquierda y la orbita del ojo. "Las fracturas están solventadas pero en la zona del ojo izquierdo no quisimos ir más lejos porque su oftalmólogo temía que dañase su vista" añadió Sugar.

 

Ahora Stephan muy contento dijo a la BBC que le habían cambiado la vida, "No tendré que disfrazarme, no tendré que esconderme. Podré hacer las cosas cotidianas, ir a ver a gente, caminar por la calle...", afirmó.

 

 

Artículo del alumno Antonio Beltrán